Así procedieron los delincuentes que esta madrugada robaron en la panadería Anusch, ubicada en Luro entre Salta e Independencia. Para entrar habían hecho un boquete en un local lindero que está vacío.
Los delincuentes que esta madrugada robaron en la panadería Anusch, ubicada en avenida Luro entre Salta e Independencia, tuvieron tiempo para comer sándwiches de miga y beber jugos frutales antes de escapar con la plata que los propietarios guardaban para pagar el alquiler del local.
Pero no solo se llevaron efectivo. También tomaron una mochila en la que la dueña del lugar llevaba ropa para ir al gimnasio, una horma de queso, una de salame, un termo y un frasco de café.
Es la tercera vez que la panadería sufre un robo “importante”, según contó la propietaria, Adriana Naveiro, a LA CAPITAL. “Hace seis años se nos llevaron hasta el CPU que conectaba con una cámara de seguridad que teníamos”, recordó indignada.
Para ingresar, los delincuentes hicieron un boquete en un local lindero de la esquina de Luro y Salta en el que, hasta dos meses, funcionaba una granja. Los vecinos del edificio, según reveló Naveiro, durante la semana ya habían escuchado algunos martillazos.
La mujer sabe que no es el primer robo con esta modalidad que se produce en el centro. Hace dos semanas, el 4 de junio, hubo uno similar en un comercio de prendas de vestir de la Peatonal San Martín al 2500. Coincidencia o no, también ocurrió entre la noche de un viernes y la madrugada de un sábado.